Año tras año, la contaminación ambiental se ha hecho más notoria y dañina. Una de las formas de combatirla es reducir la emisión de los gases de efecto invernadero, por ello, es importante conocer la tendencia de los vehículos eléctricos ya que, al no usar bencina ni diésel para su funcionamiento, son eco amigables.
A continuación, en Mundo Morales te explicamos cómo los autos eléctricos ayudan a contrarrestar el cambio climático.
¿Qué son los vehículos eléctricos y cómo funcionan?
Los automóviles convencionales usan motores de combustión interna – ICE que generalmente funcionan con combustibles fósiles como bencina o diésel. En cambio, los vehículos eléctricos utilizan uno o más motores eléctricos que funcionan con baterías recargables de iones de litio, el mismo tipo de baterías que alimentan los celulares y las computadoras portátiles.
Entonces, te preguntarás cómo funciona un vehículo eléctrico, pues al igual que los dispositivos electrónicos, los vehículos eléctricos se conectan a fuentes externas para cargar. Aunque esa no es la única forma, pues existen otros tipos de baterías que dependen del frenado regenerativo para cargar o generar electricidad a partir de la energía de fricción del vehículo.
Por otro lado, además de ser menos contaminantes que los autos de bencina, las baterías de iones de litio suelen funcionar de manera más eficiente. Muchos tienen una vida útil garantizada de 8 a 10 años.
Ahora, el rango de conducción de un vehículo eléctrico depende de la duración de la batería, a su vez las condiciones climáticas, también, pueden afectar el alcance de un vehículo eléctrico, ya que utilizan más energía para compensar.
Asimismo, debido a que los vehículos eléctricos no dependen de los combustibles fósiles para obtener energía, es posible que no tengan ciertos componentes que tienen los vehículos ICE. Por ejemplo, componentes como tuberías de combustible, tanques de combustible y tubos de escape. Como resultado, uno de los beneficios de los vehículos eléctricos es que no emiten emisiones de dióxido de carbono (CO2), lo que ayuda a reducir la contaminación ambiental.
Tipos de vehículos eléctricos
La clasificación de los vehículos eléctricos se basa en función de cuánto dependen de la electricidad como fuente de energía. A continuación, te presentamos los tres tipos de vehículos eléctricos que existen actualmente:
Vehículos eléctricos a batería – BEV
Este tipo de vehículo es completamente eléctrico y tiene baterías recargables. Utiliza una toma de carga eléctrica externa como fuente de alimentación, dependen de la electricidad y no tienen motor de bencina, tanque de combustible ni tubo de escape.
Vehículos eléctricos híbridos enchufables – PHEV
También, denominados vehículos eléctricos de autonomía extendida, funcionan con bencina y electricidad. Tienen baterías que se cargan con una salida externa y capacidades de frenado regenerativo, es decir, las baterías se recargan al pisar el pedal del freno o aprovechando las inercias de las retenciones.
Asimismo, los autos PHEV usan un motor de bencina para extender el alcance del vehículo y recargar la batería del automóvil.
Vehículos eléctricos híbridos – HEV
Al igual que el tipo anterior, los autos HEV, funcionan con bencina y electricidad. Sin embargo, la diferencia radica en que se basan únicamente del frenado regenerativo para cargar la batería.
¿Cómo funcionan? Estos vehículos eléctricos utilizan su motor eléctrico al conducir, que luego se complementa con el motor de bencina, dependiendo de los aumentos en la carga o la velocidad.
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Impacto de los autos eléctricos en el cambio climático
Usar autos eléctricos es una forma de reducir el cambio climático debido a que la emisión de gases de efecto invernadero, durante su vida útil, es menor a la de los modelos de bencina y diésel.
Si bien, algunos estudios han cuestionado el carácter ecológico de los vehículos eléctricos, debido a las altas emisiones relacionadas con la fabricación de baterías, Florian Knobloch del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Radboud, sostiene que “en la mayor parte del mundo, en los países que los vehículos eléctricos representan el 95% del transporte, las emisiones se reducen considerablemente en comparación con los automóviles de bencina promedio”.
Por ello, el especialista señaló que en países como China, Estados Unidos y en Europa es recomendable conducir un automóvil eléctrico en lugar de un vehículo de combustible fósil.
Esto cobra relevancia, teniendo en cuenta que en todo el mundo, el transporte terrestre representa aproximadamente una cuarta parte de las emisiones totales de dióxido de carbono.
Así, los beneficios de conducir vehículos eléctricos son mayores en países que usan pocos combustibles fósiles en el proceso de generación de electricidad. “Las emisiones medias en la vida útil de los vehículos eléctricos son hasta un 70% más bajas que las de los autos de bencina en países como Suecia y Francia (que obtienen la mayor parte de su electricidad de energías renovables y nucleares)”, detalla Knobloch.
En ese sentido, a medida que las fuentes de electricidad pasen de los combustibles fósiles a las energías renovables, como la energía hidroeléctrica, solar y eólica, los vehículos eléctricos se volverían más atractivos frente a las políticas medioambientales que cada vez más países han decidido implementar.
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