La mayoría de nosotros sabemos que luego de comprar un auto nuevo, realizar un mantenimiento de rutina, como cambios de aceite y servicios de transmisión, previene fallas mecánicas a largo plazo y promueve la salud general de tu vehículo. Pero, ¿sabías que tus hábitos de manejo también tienen un efecto directo en la vida útil de un auto?
La forma en que conduces en diferentes condiciones puede afectar no solo la economía de combustible, sino también la vida útil de un motor. Y dado que reparar este componente puede costar fácilmente mucho dinero, cuidar de él sin duda valdrá la pena a largo plazo.
En este artículo de Mundo GM, veremos cinco formas fáciles de modificar tus hábitos de manejo para asegurarte de que tu motor dure más tiempo. Algunos de los consejos que discutiremos son de bajo impacto en términos de cómo afectan tu viaje diario, pero contribuyen en gran medida a ahorrar dinero.
- No esfuerces mucho el motor al principio
Tener un auto nuevo es una experiencia emocionante. Después de pasar por el proceso a menudo desafiante de comprar uno, es natural querer disfrutarlo viendo lo que puede hacer en la carretera. Sin embargo, es importante que tomes todo con calma cuando se trata de un motor nuevo (por lo menos al inicio).
Lee el manual del propietario de tu auto para tener algunas recomendaciones sobre qué tan rápido puedes ir al inicio. Generalmente se recomienda no ir a más de 120 km/h aproximadamente durante los primeros 965 o 1,120 kilómetros, o exceder las 3,500 RPM en los primeros 805 kilómetros.
¿Por qué? Los motores nuevos tienen piezas nuevas que deben acostumbrarse a su papel, en particular los anillos de pistón. Estos anillos deben acostumbrarse o acoplarse a los cilindros de tu motor, lo cual lleva tiempo y una conducción cuidadosa para que eso suceda correctamente.
Si los anillos no se asientan como debe ser, tu automóvil puede empezar a quemar aceite innecesariamente. Con el tiempo, tu billetera y el motor te lo agradecerán.
- Cuida tu motor en días realmente fríos
El clima frío es duro para el motor de un carro. En estas condiciones, se necesita más energía para arrancarlo porque la batería tiene una carga más baja. Además de que el aceite es frío y espeso, lo que dificulta el funcionamiento de las piezas móviles, la gasolina no se quema tan rápido.
Entonces, ¿cómo debes actuar cuando hace mucho frío afuera? ¿Es necesario calentar el motor antes de salir? La mayoría probablemente se sentará detrás del volante y dejará el motor en ralentí mientras el motor se calienta. No obstante, esta no es necesariamente una buena idea.
Dejar que el automóvil funcione en ralentí en realidad calienta el motor a un ritmo lento, porque este en realidad no estará haciendo mucho. Por otra parte, este emitirá más contaminación por hidrocarburos que tu convertidor catalítico (el dispositivo que ayuda a limpiar las emisiones del tubo de escape).
Dejar que tu carro esté inactivo mientras deja salir más hidrocarburos de lo normal puede obstruir el convertidor catalítico, provocar que no funcione correctamente y causar un bajo kilometraje, así como emisiones peligrosas.
Tu mejor opción es encender el motor, esperar de 30 segundos a un minuto (como máximo) y luego conducir suavemente hasta que tu motor se caliente por sí solo.
- No exageres al acelerar
No, no te imagines conduciendo en una película como “Rápidos y Furiosos” mientras estás en la carretera. Esto sería malo por muchas razones. Conducir demasiado rápido desperdicia gas, aumenta las emisiones y, por supuesto, te pone en riesgo de recibir una multa o involucrarte en un accidente.
Por otra parte, ¿sabías que la velocidad excesiva también es mala para tu motor? Lo obliga a trabajar más duro al bombear y usar más combustible, provocando que los pistones y otras piezas móviles funcionen a una velocidad mayor que la óptima.
Debido a esto, mantener tu velocidad lo más baja posible mientras conduces de manera segura es una excelente forma de reducir el desgaste de tu motor.
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- Cambia de marcha correctamente
Este consejo para mejorar los cuidados de un motor está dirigido a los conductores que tienen un carro con transmisión mecánica o manual. Si tienes uno con caja automática, no deberás preocuparte por este punto.
Cuando conduces con una transmisión manual (o mecánica), es importante estar en la marcha correcta. Es probable que hayas notado que acelerar mucho para tu rango de RPM provoca que tu automóvil tiemble y se mueva lentamente debido a que se crea una tensión innecesaria en el motor.
Este problema puede dañar las culatas, lo que lleva a reparaciones costosas en un futuro. Más bien, cuando sientas esos pequeños temblores, tu carro en sí te está pidiendo que cambies a una marcha mayor.
Adicionalmente, es una buena idea evitar el frenado excesivo del motor. El frenado del motor ocurre cuando conduces a una marcha más alta, luego bajas a una más baja y quitas el pie del acelerador. Esto hace que aumenten las RPM y que tu automóvil disminuya la velocidad sin usar los frenos.
Si bien es eficaz para reducir la velocidad y puede facilitar cuando doblas las esquinas de las calles, este tipo de frenado puede producir un desgaste excesivo en el motor. Es mejor usar los frenos cuando necesites reducir la velocidad y luego cambiar a una marcha más baja.
No sobrecargues tu auto
Los vehículos como los camiones de servicio pesado suelen llevar motores grandes y potentes con mucho torque, ya que están diseñados para remolcar y transportar artículos más pesados que su propio tamaño y peso.
Los carros tienen motores más pequeños y es posible que no posean el torque y la potencia necesarios para mover correctamente remolques, botes u otros vehículos. Las pick-ups y las camionetas podrían lograrlo, pero lee al manual de usuario para saber sus capacidades.
Remolcar objetos grandes más allá de la capacidad que tiene tu vehículo crea una tensión adicional en el motor, la cual puede dañar las piezas y reducir su vida útil. Si esto ocurre, deberás requerir los servicios de mantenimiento preventivo de un motor.
Si sigues estos consejos y te esfuerzas para cuidar tu motor, podrás ahorrar mucho dinero en reparaciones. Incluso verás otros beneficios, como una mejor eficiencia de combustible y menos desgaste en las piezas de tu automóvil, como la transmisión y los frenos.
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